Capítulo 24
Llegamos
al muelle ya bien entrada la noche. Aún quedaba una hora para las doce, pero
eso al menos me daría tiempo para comprobar los alrededores. Y, claro está,
comprobar si había algún indicio de presencia policial y federal. Lo que por
ahora, era poco más que nada. Este sitio
está desierto…