Parte V
23/07/15 (12:05h)
(AMELIA)
La luz blanca de los fluorescentes empezaba a ponerme
nerviosa y ya no sabía cómo disimilar hecho de que no hacía más que mirar la
puerta que daba al vestíbulo del hospital.
A mi lado, Melinda abrazaba a Taylor mientras ésta
miraba en la dirección contraria a la mía, esperando que alguien saliera para
decirle el estado de Tori. Peter no paraba de dar vueltas nervioso mientras se
comía las uñas y Logan hacía rato que se había marchado para dejar listo el
papeleo con la policía de Nueva York. Pero Jackie… Jackie no estaba… Jackie se
había ido… Annie.
Annie… La
chica del ejercito… La que la abandonó por un hombre y un rango superior… Esa
Annie… Y se ha ido con ella… ¿Por qué se ha ido con ella? ¡La abandonó! ¡La
engañó! Vamos Jackie vuelve ya… Vuelve y dime que sólo tenía que devolverte unos
CDs o algo así…
¿Y sí todo fue
un malentendido? ¿Y sí Annie tuvo que marcharse por cualquier otro motivo y
todo lo demás sólo fueron rumores? ¿Y si ahora que se ha reencontrado con
Jackie quiere estar con ella? O peor… ¿Y si es Jackie la que quiere arreglar
las cosas? ¿Qué haría yo entonces?
No… Espera
Amelia. ¿Por qué debería importarte? Sí… Jackie te gusta. Pero después de todo
lo que acaba de pasarte ¿Deseas entrar de nuevo en una relación? Lo más seguro
es que Jackie aún se acueste con esa mujer… Aún van al parque juntas con su
hijo los fines de semana… y lo sabes porque tiene el descaro de salir a correr
por los lugares en los que sabes que estarán…
Y luego está
Troy… ¿Cómo pudiste hacerme algo así? ¿Cómo pudiste?...
Recuerdo…
(19/07/15 – 22:00h)
Estaba tan
agotada tras la tarde con mis hermanas que me había tirado a la cama nada más
llegar. Troy aún no había llegado aún y sinceramente fue un alivio… Después de decirle
a mis hermanas mis preocupaciones y mis dudas ya tenía clara mi respuesta para
Troy, pero aún no estaba lista para enfrentarme a ello… Tal vez después de la
boda se lo diga…
¡Knoc Knoc
Knoc!
Con un gruñido
molesto, me levanté de la cama y me dirigí a la puerta… Tal vez Troy se había
dejado las llaves…Sin embargo, tras mirar por la mirilla abrí la puerta
asombrada a un exaltado Paul.
- ¿Tú lo
sabías? – Me gruñó nada más pasar por la puerta. Tenía los ojos rojos y de su
aliento emanaba un fuerte olor a alcohol. - ¿Lo sabías?
- Espera Paul,
cálmate. No sé a qué te refieres… - Le dije, intentando calmarle, pero Paul
alzó los brazos violentamente.
- ¡Mientes!
Ella me ha dicho que te llamó…
- Espera… ¿Ella?
¿Te refieres a Cammie?
- ¿Quién si no?
No puedo creer que me haya hecho esto… No puedo creer que lo haya hecho… Y tú
le perdonas… ¿Cómo puedes? – Gruñía con voz temblorosa y rota, al borde de las
lágrimas.
- Por favor
Paul, cálmate… No sé de qué estás hablando. Cammie me llamó hace algún tiempo
pero apenas me dijo nada… Parecía preocupada por algo pero no he vuelto a saber
nada de ella… ¿Es eso?
- ¡No! ¡Claro
que no! ¡Hablo del engaño! Sé que ella ya…. Ya no estaba… conmigo… Aun así…
Esto duele… Esto me duele muchísimo… - Paul se había desmoronado… Se sentó en
el sofá y comenzó a llorar con fuerza. Entendiéndolo un poco mejor. Me senté a
su lado e intenté calmarle. Poco a poco, se fue recomponiendo hasta sentarse
más erguido… era la primera vez que le veía llorar y entendía su sufrimiento. –
Lo… Lo siento Amelia…
- No te
preocupes Paul… Es normal que estés así, pero también tienes que entender que
Cammie está siguiendo con su vida… No dudo de que te quiera, pero puede que
sencillamente se esté forzando a olvidarte viendo a otras personas… - Con el ceño
fruncido, Paul me miró extrañado.
- Cielos no lo
sabes… de verdad que no lo sabes… - Dijo Paul con voz queda.
- ¿Saber el
qué? – Pregunté asustada.
- Que el
hombre con el que Cammie se ha acostado es Troy…
- ¡Ya sale! – El grito de Peter me sacó de mis
recuerdos y me hizo girar la cabeza. Un doctor salía de cuidados intensivos y
se dirigía hacia nosotros.
- ¿Son ustedes los familiares de la señora Crowell? –
Preguntó el doctor, nada más llegar hasta nosotros. Rápidamente, Taylor se alzó
y se puso delante de él.
- Yo soy su prometida. ¿Cómo está? – Preguntó preocupada.
Para alivio de todos, el doctor mostró una ligera sonrisa
- La señora Crowell se encuentra ahora mismo
estable. Sufrió un shock hipovolémico por la pérdida excesiva de sangre pero no
ha afectado a ningún órgano. Es una mujer fuerte. Ahora mismo esta aceptando
bastante bien las transfusiones de sangre. Lo que más me preocupa, sin embargo,
es el estado psicológico en el que se pueda encontrar una vez se recupere poco.
Me temo que muchas de las heridas dejaran cicatrices, algunas de ellas no tan
físicas como me gustaría. Pero seguro que con tiempo y cariño podrás dejar este
episodio atrás… Si lo necesitan, les recomendaré una psicóloga muy buena en la
ciudad…
- No gracias doctor… Yo me haré cargo. – Dijo Taylor
rápidamente, visiblemente aliviada. - ¿Cuándo podré verla?
- En unos veinte minutos será trasladada a planta,
una vez allí, podrán verla. – Dijo el doctor sonriente.
- Muchísimas gracias doctor. – Le dijo Taylor, con
nuevas lágrimas en los ojos.
- No me las dé a mí… Es obvio que esa mujer tenía
algo maravilloso por lo que luchar. Y ahora que la conozco no me cabe ninguna
duda de cual es su fuerza. Que pasen buena tarde.
Una vez que el doctor se había ido, todos nos
hundimos en un abrazo colectivo. Tan necesario por tantas razones.
- Dios… Menos mal que está bien… - Dijo Peter,
soltando el aire que parecía ver estado conteniendo.
- Gracias a todos chicos. Si no hubiera sido por
vosotros, ahora Tori… - Comenzó Taylor, pero Melinda la cortó.
- Eh… ya basta de penas. Tori es una luchadora y
está bien, eso es lo que importa. Ahora debes prepararte para verla… -
Asintiendo, Taylor siguió a Melinda al baño, para poder serenarse antes de ver
a Tori. Peter acababa de marcharse fuera para llamar a su mujer cuando mi móvil
vibró. Era Jackie.
- ¡Eh! ¿Cómo está? – Preguntó nada más descolgar el
móvil.
- ¡Bien! Cielos está bien… El médico dice que lo más
preocupante es el impacto que sufrirá después de todo lo ocurrido Pero está
bien… Tendrá cicatrices, pero no creo que eso importe…
- Claro que no… Me alegro de que todo haya acabado
bien… ¿Ya la habéis visto?
- No, dentro de unos veinte minutos la subirán a
planta. – A pesar de estar mordiéndome el labio para no preguntar, acabé haciéndolo.
- ¿Vas a venir? Estaría bien que cuando Tori despierte estemos todos…
- Humm… No sé si me dará tiempo a llegar para cuando
eso pase… Seguramente me pasaré por el hospital más tarde.
- Está bien… avísame cuando vayas a venir ¿De
acuerdo? Seguramente en un par de horas Melinda y yo vayamos a un hotel a
registrarnos. Logan dice que hasta dentro de un par de días no podremos usar el
apartamento de Tori y Taylor…
- Genial. Mandadme un mensaje cuando os hayáis
registrado… Tengo que dejarte. Dile a la Tori que pasaré a verla pronto.
- Lo haré. Hasta… - colgó. - … luego. – Terminé sintiéndome
algo rara. Apoyé el móvil contra mi barbilla y miré a lo largo del pasillo
vacío, sintiendo que cada minuto que pasaba mi vida se parecía más a ese
pasillo…
23/07/15 (12:45h)
(TORI)
Un desagradable hormigueo me recorría por todo el
cuerpo. Tenía ganas de huir… de escapar… Pero estaba tan cansada…
Temía abrir los ojos y encontrarme de nuevo con esa
desagradable sensación… ese frío cuchillo sobre mi piel… El aire burlándose de
mis heridas… las gotas de sangre caer por m cuerpo lentas y pesadas…
No. No quería despertar…
- ¿Cariño? – Oh…
Taylor… Te echo tanto de menos… - ¿Tori? – Fue entonces cuando sentí una
caricia atravesar el hormigueo y agarrar mi mano suavemente. – Victoria…
- ¿Taylor? – pregunté con voz ronca y seca. Mis
parpados eran tan pesados que tuve que hacer varios intentos hasta que finalmente
conseguí abrirlos. Fue entonces cuando la vi, borrosa e iluminada por una
intensa luz blanca… Mi ángel… - ¿Estoy
en el cielo? – Mi amor, con ojos llorosos y manos temblorosas, agarró mi cara
con cuidado y posó sus labios sobre los míos tan suavemente que ansié enseguida
un mayor contacto… - Definitivamente estoy en el cielo. – Dije al mirar a
través de las lágrimas y perderme en sus preciosos ojos azules.
- Te amo mi vida… - Gimoteó Taylor acariciando mi
cara con cuidado.
- Yo también te amo mi amor… - Cómo pude, levanté
mis brazos y rodee los estrechos hombros de Taylor, instándola a tumbarse a mi
lado.
- No mi amor… Estás herida… - Taylor intentó
apartarse, pero parecía tan débil como yo
- Taylor, necesito abrazarte… necesito sentirte… Por
favor… - Después de mirarme durante unos segundos que parecieron eternos. Con
cuidado, Taylor se fue tumbando a mi lado hasta posar su cabeza en mi hombro y
soltar un suspiro largo tembloroso. El dolor era errático y punzante pero tener
a Taylor a mi lado después de creer que no volvería a verla era un bálsamo indescriptible.
Asombrosamente, Taylor se quedó dormida a mi lado. Pero yo, a pesar del cansancio,
no quería cerrar los ojos… no quería dejar de ver a mi ángel dormido…
Por fin!!! Ah estado muy bueno e intrigante 0-0, quiero ver que pasa con Jackie y Amelia vs Annie, segunda vez comentando, saludos desde México :)
ResponderEliminarPor Finnnnnn!! Me encanta Wild & Wise. A esperar con ansias el siguiente, me gustaría q no tardasen mucho en estar juntas Jackie y Amelia ;) Gracias x la historia!! Carmen.
ResponderEliminarHola me alegra ver q vuelve a funcionar el blog....espero siga de manera constante, asi no se pierde el sentido de las historias. Saludos😏
ResponderEliminarQue lindo capitulo ,como siempre muy bueno mi BellaNat ,y lo de Troy ya me lo sospechaba...gracias
ResponderEliminarte quiere Paulina