El Ritmo Del Deseo Capítulo 9

CAPÍTULO 9

(LOREN)

Me senté en las gradas cruzando las piernas con cuidado, ya que el vestido era muy corto para sentarse en un lugar donde cualquiera que se sentara debajo vería toda mi ropa interior, y esperé tranquilamente a que Susan se sentara a mi lado, recogiendo su largo vestido a un lado y colocándose a un lado la trenza francesa.

Desde que la vi cuando salí del gimnasio para hacernos la foto de grupo con las animadoras, pensé que nunca la había visto tan guapa, justo después, como era normal, Susan huyó de mí para irse con Jake al baile… y ahora estábamos aquí, después de que ese asqueroso de mierda intentara forzarla a…

- Bueno, parece que es un lugar lo bastante tranquilo para hablar… y estoy deseando volver a escuchar esa disculpa de antes. – Dijo Susan, mirándome divertida. Bueno, al menos ya no me evitaba, eso es algo… Así que tome aire y lo solté sin más.

- Siento mucho como te respondí la semana pasada… lo cierto es que estaba muy contenta de que al fin consiguieras una plaza en la universidad, pero después de oírte hablar con Cindy de esa manera yo…

- Yo también siento eso. – Dijo ella rápidamente. -  La verdad es que Liz ya me advirtió de que eso me traería problemas y he tenido que descubrirlo de la forma más desagradable…

- Bueno… lo cierto es que yo sólo entré en el vestuario porque os vi pelear y cómo te obligaba a entrar a la fuerza… se le notaba bebido y no quería que te hiciera daño. – Dije con sinceridad. Evitando su mirada añadí. – Aunque entiendo que con tu pareja es normal hacer ese tipo de cosas…

- ¡A eso es a lo que me refería! Yo realmente nunca he… - Susan se calló de repente, completamente colorada. – Ya… me entiendes…

- Pues la verdad es que no… ¿a qué te refieres? – Pregunté extrañada. Susan se acercó un poco a mí y se tapó la boca para evitar que alguien más la oyera…

- Pues que… nunca he tenido sexo…

- ¿CÓMO QUE NO? – Grité enfadada. Susan me hizo señas para que bajara la voz, así que le susurre con fuerza. - ¿Pero cómo que no has tenido sexo? Más de una vez he aguantado todas tus aventurillas con tus novios por no decir lo que le ibas diciendo a las demás… - Estaba enfadada… ¿Entonces Susan me había mentido todo este tiempo?

- Ya, lo sé, lo siento mucho… todo se me fue de las manos con un estúpido rumor que no negué y pensé que así sería más fácil… no quería ser una virgen…

- Por dios Susan, ¡ser una virgen no es tan importante! Liz no se ha acostado nunca con nadie y no veo que nadie la recrimine por eso… es más… creo que los chicos la ven como la madre teresa de Calcuta con tetas… - No pude evitar reírme por ese comentario que me hizo Kate cuando la conocí haciendo referencia a su objetivo inalcanzable… Susan también se rio…

- Sé que fui muy infantil con todo eso… sobre todo añadiendo más leña al fuego por mí misma, pero… sí, no sé, que seamos vírgenes tampoco es tan importante… al menos me siento acompañada… - No pude evitar apartar la mirada y Susan lo notó. – Porque… tú también eres virgen… ¿Verdad? Si no, me lo habrías…contado… - Susan parecía suplicante cuando al fin me giré y la miré. Dios, no podía mentirle con eso… además, tampoco es que se lo haya ocultado… sólo fue hace una semana y apenas nos hemos dirigido la palabra desde que pasó…

- Bueno… verás… lo cierto es que yo ya no…

- ¿Cuando? – Me preguntó Susan seriamente. Jugaba nerviosamente con su vestido y esperaba impaciente una respuesta sin apartar la mirada. - ¿Cuándo Loren? – Volvió a preguntar. Bueno… no tengo que decirle que fue con una mujer…

- Fue este… fin de semana… - Dije avergonzada. Susana brío los ojos como platos.

- Así que al menos una de las dos si es seria cuando habla de sexo con otras personas. – Dijo amargamente. – Entonces… ¿fue el viernes? – Yo no estaba segura si seguir contestando a sus preguntas, cada vez se veía más enfadada y dolida. – Vamos Loren, eres mi mejor amiga, quiero saberlo.

- La primera vez… sí. – Dije esquivando sus ojos.

- La primera vez… entonces, fue bien por lo que parece… enhorabuena.- Susan tenía la voz rota y su comentario fue bastante seco.

- Siento no habértelo contado antes… pero como estábamos así, no tuve la oportunidad de decírtelo, lo siento…

- ¿Es Kate? – Me preguntó directamente.

- ¿Qué? – Pregunté alterada… No puede ser que lo sepa… ¿cómo lo sabe?

- ¿Qué si fue con Kate con quien te acostaste el fin de semana? – Me preguntó de nuevo. Sí decía que sí estaba admitiendo que era lesbiana…pero ya estaba harta de ocultarlo… hasta Liz lo sabía ya, y si íbamos a compartir piso en un par de meses lo iba a acabar descubriendo tarde o temprano. - ¿Y bien?

- Sí… fue con Kate. – Susan asintió sin más y empezó a mirar con detenimiento algún punto del campo de futbol.

- Sabes, en realidad ya lo sabía… - Yo la miré extrañada… no verdad, no se ha dado cuenta de que a mi ella me… - La semana pasado os vi debajo de las gradas abrazadas, después recordé de que todas las semanas salías con una chica de tu barrio, así que supuse que sería ella… - Espera… se refiera a cuando Kate me estaba consolando después de escuchar su conversación con Cindy… - ¿La quieres?

- Sí, la quiero. – Dije con seguridad. Vi como algo en los ojos de Susan se rompía en mil pedazos, y no sé por qué añadí. – Pero no la amo… creo que Kate y yo somos más como hermanas en ese sentido… - Susan pareció asombrarse.

- ¿Y te acuestas con todas tus hermanas? – Me preguntó Susan molesta, pensando que le estaba mintiendo.

- No, no es eso… es sólo que… - Joder, esto es muy difícil. - Mira, no sé cómo explicarlo exactamente. Conozco a Kate desde hace más de un año, es sexy, es divertida y me ha apoyado siempre que lo he necesitado, para mí fue muy natural dar ese paso con ella… prefería eso a dejarme caer en los brazos de la primera lesbiana que encontrara en Nueva York… Supongo que tenía miedo de muchas cosas y ella era algo seguro…

- Entonces… ¿ella y tú no sois…novias? – Me preguntó Susan extrañada.

- No, que va… se podría decir que es mi mejor amiga lesbiana. Por no decir de que ella está enamorada hasta las trancas de otra persona….

- Si está enamorada de otra persona… ¿por qué se acostó contigo? No lo entiendo…

- Ya. – Dije riendo. – me costó bastante convencerla para eso, ella no estaba muy segura… de todas formas ella cree que es una amor imposible. Yo tampoco le veo muchas posibilidades…

- Espera… ¿Tú tuviste que convencerla para que se acostara contigo? ¡Loren!

- Ya, ya… ya he dicho que lo siento un millón de veces… pero, no sé Susan… fue muy divertido.

- ¿Divertido? Se supone que el sexo es pasional… o romántico… no divertido… - Dijo nerviosa. – O al menos eso es lo que dicen las películas y los libros… - No pude evitar reírme.

- Sí, no te digo que no fuera placentero… pero fue divertido… ¡el sexo es divertido! O al menos el sexo con Kate… supongo que tiene que ver también con la confianza que tengas con la otra persona… supongo que si lo hiciera con alguien a quien amo será diferente… - Susan me miró a los ojos profundamente.

- Sigo pensando que no tiene sentido, Loren… - Yo la miré también, intentando decirle con mis ojos todas las sensaciones confusas que sentía.

- Supongo que no… pero, ¿A quién le importa? – Dije sin más. – Dios, estoy tan feliz de que no flipes con esto… es decir, ni siquiera me has preguntado si soy lesbiana… sólo me has preguntado si fue con Kate… me alegro de que mi sexualidad no sea un problema para nuestra amistad…

- Loren, nada de lo que hagas me va a hacer separarme de ti. Puede que sólo esté algo molesta porque no me lo hayas contado antes pero… supongo que tenías miedo de perderme… ¿es así?

- Básicamente…es así.

- ¿Y desde cuándo? – Me preguntó.

- ¿Desde cuándo qué? ¿Soy lesbiana? – Ella asintió con la cabeza. – Supongo que desde siempre… tampoco he pensado mucho en ello, la verdad. - Susan suspiró con fuerza.

- Dios, las cuatro juntas en Nueva York… - Susan se tapó la cara con las menos y negó con la cabeza. - ¡Qué desastre!

- Y que lo digas. – Dije feliz. Al menos, ahora estaba segura de que Susan me apoyaba y poco a poco, tal vez, mi amor por ella se vaya trasformando en una amistad fuerte y duradera… o puede que tal vez conozca a alguien que me haga olvidar mis sentimientos por ella… quien sabe, pude que dentro de unos años se lo diga y nos riamos juntas.  Sea como sea, esto sólo es el comienzo de una nueva etapa juntas. Una etapa sin secretos ni malentendidos… o al menos, eso espero.

(Nota: ¡La semana que viene nuestras 4 protagonistas ya estarán en Nueva York! donde comenzara el salseo en toda su esencia :D)